
Anadel Lynton trabaja con su cuerpo, viejo, movido, femenino y feminista, comunitaria y partidaria de las comunidades indígenas, del buen vivir como meta humana, esperanza para un futuro sin dominados y dominadores, descolonizado, despatriarcalizado, con paz, dignidad y justicia. Busca experiencias creativas con movimiento en sus comunidades.
En el Filo
Tres canastitas encercadas con flores contienen preguntas sobre quiénes se responsabilizarán por los árboles muertos, los humanos clonados, y otros retos desesperados de la humanidad. Se invita a los participantes a hacer movimientos simples y a balancear flores en su cuerpo; a tomar preguntas y leerlas en voz alta, abriendo un diálogo.